martes, 18 de enero de 2011

Seres Imaginarios de Ayer y Hoy (4)




Temerosos de Paraísos Extraños



“Siempre me ha parecido un tío aburrido, además. Olvídalo.”

Me ofrece un cigarrillo que rechazo con un gesto. Ya hace medio año que no enciendo un puñetero cigarro, pero sigue ofreciéndome cada vez que ella enciende uno. No sé si es que es de escasa memoria o quiere tentarme. Seguramente lo segundo.

“¿Entonces qué hacemos? ¿Se lo devuelvo?”

Me responde con un gesto que lo dice todo. Dice ‘¿tú que crees?’. O también,’ si te parece nos hacemos un piano con lo que sobre’. Algo sarcástico en todo caso, porque no quiere hablar ni un segundo más del tema. Pero quiere que sea yo el que cambie la conversación, el que cambie el mundo.

Se levanta. Cambia de idea y vuelve a sentarse. Veo su cara apenas ajada intentar dibujar una sonrisa conciliadora que me haga imaginar que habrá algún tipo de compensación. Pero no ahora mismo.

“No hace falta que vayas. Que se venga él. Seguro que le pueden acercar, y listos”

Ahora tengo ganas de encender ese maldito cigarro, por una razón. No decir ni una palabra hasta acabar de fumármelo. En plan tío duro que no sufre una mierda porque le quiten el juguete de las manos. Giro la cabeza y miro por la ventana. Un último vistazo al coche rojo que aguarda afuera bajo la lluvia.

Las gotitas de agua lo cubren como un manto divino. El ruido que producen es estremecedor.



18 de Enero de 2011

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
Free counter and web stats